Chava Flores fue conocido cono un compositor y cantante mexicano. Nació en el barrio de “La Merced”, en el centro histórico de la Ciudad de México. Flores es considerado como uno de los más grandes compositores mexicanos de música popular en el siglo XX. Se le podía nombrar de distintas maneras: Cronista musical de la Ciudad de México, compositor festivo de México y folclorista urbano, entre otras. Mas él prefería ser nombrado como el Hacedor de Canciones. Su padre murió en 1933, por lo que tuvo que comenzar a trabajar para contribuir al sostenimiento de su familia. Trabajó como costurero, cobrador, contador (sin título), dueño de una tienda de ropa, ferretero, repartidor de carne, y trabajador en una imprenta, donde además dio sus primeros pasos como compositor y cantante. En 1986 Chava se mudó a Morelia, Michoacán. Escribió en 1951 Dos horas de balazos, su primera canción en llegar a la radio, inspirada en las películas del lejano oeste. Después escribió La tertulia, y ambas canciones fueron grabadas por RCA Víctor en 1952. También actuó en carpas y cabarets de la ciudad, ganando fama en el resto del país, en América Latina y en Estados Unidos. En 1976 grabó siete discos de larga duración y fue dueño de la disquera Algeleste. Apareció en siete películas del cine mexicano: Mi influyente mujer, La esquina de mi barrio, Rebeldes sin causa, Bajo el cielo de México, El correo del norte, La máscara de la muerte y ¿A qué le tiras cuando sueñas mexicano?, donde actuó al lado de Luis de Alba. Incluso sus canciones aparecieron cantadas en otras películas en voz de actores como Germán Valdés y Pedro Infante. En 1986 se mudó a la ciudad de Morelia, Michoacán, donde tenía un programa de televisión. Al año siguiente se trasladó a la Ciudad de México por una urgencia médica, que le llevó a la muerte pocos días después, el 5 de agosto de 1987. Sus canciones reflejan un profundo conocimiento del folclor de la Ciudad de México a mediados del siglo XX, por lo que parodia a la sociedad y las actividades cotidianas. Su popularidad fue tal que frases enteras de sus canciones forman parte del lenguaje popular, o simplemente se han convertido en dichos populares aplicables a la vida diaria, como “A qué le tiras cuando sueñas mexicano”, “Sábado Distrito Federal”, y “Llegaron los gorrones”.
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